Poner la tierra abandonada a disposición de quienes la quieran trabajar. Con el objetivo de reactivar las fincas en desuso o sin propietario localizado, la Xunta aprobó el pasado mes de diciembre la Ley de recuperación de la tierra agraria, ahora en tramitación parlamentaria. El conselleiro de Medio Rural, José González, avanzó ayer la fecha de entrada en vigor: el próximo mes de mayo.

En una entrevista a la Radio Galega, González destacó que esta normativa busca luchar contra el abandono del medio rural y prevenir incendios forestales. Así, “entendiendo que el minifundismo es uno de los principales problemas” de estas zonas, busca apoyar a los propietarios y los interesados en realizar un aprovechamiento de la tierra y alcanzar producciones con valor añadido, para lo que plantea la puesta en marcha de actividad económica en 18.000 hectáreas abandonadas y la recuperación de aldeas.

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Además, recoge la posibilidad de dotar a la Xunta de la facultad para realizar una investigación que permita identificar a propietarios de terrenos, que podrán acreditar su titularidad durante un periodo de cinco años sin acudir a los tribunales, para fomentar la puesta en valor de parcelas. Sobre este punto, ha precisado que “en Galicia que hay 11 millones de parcelas catastrales y sin propietario figuran 300.000”, aunque el número de fincas sin dueño localizable es superior.

El titular de Medio Rural destacó además que la ley persigue una ordenación de usos mediante un catálogo y que aspira a potenciar los agroganaderos y forestales para evitar el abandono de la tierra.

Por otra parte, González se mostró confiando en que el anteproyecto de ley de prevención y extinción de incendios forestales se finalice este año. La Xunta busca potenciar la formación de los trabajadores del servicio de prevención y extinción de incendios, para lo que se ha apostado por la puesta en marcha de un centro en Toén en el que se impartirá preparación práctica y por el desarrollo de líneas cortafuegos que impidan que los incendios afecten a grandes cantidades de terreno.

El objetivo del plan forestal de Galicia, según recordó, pasa por alcanzar un desarrollo socioeconómico sostenible en el monte y el rural gallego. Coincidiendo con las movilizaciones en 22 concellos para reclamar la paralización del Plan forestal, González explicó que la moratoria para la plantación del eucalipto también entrará en vigor en mayo. Así, señaló que se decretará la suspensión temporal de nuevas plantaciones de eucaliptos en las superficies en las que no se realizasen con anterioridad hasta finales de 2025.

En todo caso, destacó que se contempla la posibilidad de revisar esta medida cuando se finalice la realización de un inventario sobre esta especie, que se prevé que se termine “a finales de 2021 o principios de 2022”. “Lo que se pretende es consolidar un monte multifuncional y con diversidad forestal”, ha indicado el conselleiro, que ha insistido en que el mercado requiere de una diversificación y en que la moratoria “no va contra ninguna especie”. El plan especifica que el objetivo es reducir en un 5% la superficie de eucalipto y aumentar las zonas de castaños y frondosas. González reiteró que se busca una “mejora genética” y “la transformación de eucaliptales que no tienen rentabilidad adecuada en otras especies”, para lo que se articularán ayudas públicas.